LA PLATA.- El gobierno bonaerense decidió restringir al mínimo la difusión de datos estadísticos sobre la marcha de su gestión en materia de seguridad. "Nuestra política es no difundir estadísticas ni que hable el ministro Stornelli" [Carlos], dijeron a una fuente confiable funcionarios del gobierno de Daniel Scioli.
Desde que asumió en su cargo en Seguridad, Stornelli instruyó personalmente a sus colaboradores para que no aceptaran pedidos de entrevistas ni brindaran información sobre la evolución de los índices delictivos, informaron sus voceros. "Las pocas notas que concedió a los medios se gestaron a partir de las relaciones personales del funcionario y no de su oficina de prensa", reconocieron las fuentes.
Hace unos 20 días, el vocero oficial de la cartera conducida por el ex fiscal, Gustavo Figueroa, renunció a su cargo luego de quejarse ante varios periodistas por no contar con información ni estructura para comunicar datos sobre la gestión.
Tras la dimisión de Figueroa, la tarea de comunicación institucional de Seguridad quedó en manos de Adriana Belmonte, que se comprometió con el periodismo a difundir una evaluación de la gestión que incluyera datos estadísticos cuando se cumplieran los primeros seis meses de gestión. Es decir, el martes pasado. No sólo no cumplió sino que, ante el reclamo, pidió que se le enviara una nota por escrito. No la respondió.
En los últimos seis meses tampoco llegaron datos del delito a la Legislatura ni a las ONG que trabajan con información ministerial y ejercen un contralor sobre las políticas públicas.
"Nosotros accedimos sólo a alguna información extraoficial que indica que los índices tienen una evolución positiva", dijo el senador Enrique Salzmann (PJ), titular de la Comisión de Seguridad del Senado provincial. El mismo panorama describió la presidenta de la comisión homónima de la Cámara Baja bonaerense, Silvia Cavallero (PJ). Por su parte, el director ejecutivo del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Gustavo Palmieri, dijo: "La falta de información impide sacar conclusiones y avanzar en un debate serio sobre inseguridad".
Desde que asumió en su cargo en Seguridad, Stornelli instruyó personalmente a sus colaboradores para que no aceptaran pedidos de entrevistas ni brindaran información sobre la evolución de los índices delictivos, informaron sus voceros. "Las pocas notas que concedió a los medios se gestaron a partir de las relaciones personales del funcionario y no de su oficina de prensa", reconocieron las fuentes.
Hace unos 20 días, el vocero oficial de la cartera conducida por el ex fiscal, Gustavo Figueroa, renunció a su cargo luego de quejarse ante varios periodistas por no contar con información ni estructura para comunicar datos sobre la gestión.
Tras la dimisión de Figueroa, la tarea de comunicación institucional de Seguridad quedó en manos de Adriana Belmonte, que se comprometió con el periodismo a difundir una evaluación de la gestión que incluyera datos estadísticos cuando se cumplieran los primeros seis meses de gestión. Es decir, el martes pasado. No sólo no cumplió sino que, ante el reclamo, pidió que se le enviara una nota por escrito. No la respondió.
En los últimos seis meses tampoco llegaron datos del delito a la Legislatura ni a las ONG que trabajan con información ministerial y ejercen un contralor sobre las políticas públicas.
"Nosotros accedimos sólo a alguna información extraoficial que indica que los índices tienen una evolución positiva", dijo el senador Enrique Salzmann (PJ), titular de la Comisión de Seguridad del Senado provincial. El mismo panorama describió la presidenta de la comisión homónima de la Cámara Baja bonaerense, Silvia Cavallero (PJ). Por su parte, el director ejecutivo del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Gustavo Palmieri, dijo: "La falta de información impide sacar conclusiones y avanzar en un debate serio sobre inseguridad".