martes, 17 de junio de 2008

Luis D´Elía toma una actitud sediciosa y anticonstitucional.

El día 16/06/08 Luis D´Elía tomó el micrófono y lanzó, en una abierta actitud sediciosa, una invitación en tono de afrenta. "Convocamos a todos los argentinos a la plaza para evitar el golpe de Estado económico de Eduardo Duhalde, los ruralistas y Clarín."

Además, hizo referencia al artículo 21 de la Constitución Nacional Argentina, el cual establece la obligación (no el derecho) de armarse en defensa de la patria siempre y cuando el Congreso Nacional así lo determine, no en momentos en que un particular (sea presidente, ex presidente o piquetero) lo desee.

De este modo, Luis D'Elia llama a una guerra interna armada en momentos en que más de 80% de la población pide a gritos de cacerolazos paz y diálogo.

El hecho se realizó en un hotel abandonado del Once, donde el Gobierno cedió a las organizaciones sociales, las mismas que ejercen actos terroristas a modo de paramilitares fieles al Matrimonio Kirchner, horas antes de que las cacerolas tronaran en todo el país.

Sus palabras fueron el resultado de una charla que el piquetero mantuvo con el ex presidente Néstor Kirchner, con quien acordó la línea de la convocatoria oficial al acto en repudio al campo, y las vías de liberar la violencia a partir del grupo piquetero oficialista.

"El jefe de la conspiración es Eduardo Duhalde, conocido golpista que goza de impunidad por los privilegios que le ha dado la década del 90 en la ostentación de su poder político y económico", agregó el piquetero, con tono encendido. Por supuesto, no presentó ningún tipo de prueba, hecho que da clara muestra de la impunidad conque se mueve Luis D'Elia ante la justicia argentina, amparado por el autoritarismo de Néstor Kirchner, quien es cómplice de estas acciones.

"Tenemos información, pero preferimos guardarla", dijo el piquetero primero. Y luego agregó: "Además, hoy [por el 16/06/08] estuvo Raúl Castells, que es un vocero encubierto de Duhalde, protestando en la Plaza de Mayo contra la política del Gobierno con el campo", agregando más falacias a su discurso, con acusaciones que en cualquier país serio deberían derivarle por lo menos una citación judicial.

Y remató: "Y Duhalde fue quien comandó los saqueos en el conurbano en 2001 y no descartamos que ahora esté planeando saqueos en Lomas de Zamora". También acusó de "golpistas y sediciosos" a los líderes de las cuatro entidades rurales.

Horas después, Duhalde repudió las acusaciones en un comunicado en el que reclamó diálogo y cuestionó a "los que actúan con las categorías de la guerra", según las cuales "el triunfo deviene por la eliminación del que piensa diferente", el ex presidente rechazó las palabras de D Elía.

"El ex presidente Eduardo Duhalde no responderá a las agresiones, pues ello sólo serviría a los fines de quienes pretenden generar una escalada de violencia y el peor favor que podemos hacerles a nuestra democracia y a nuestras instituciones es entrar en el juego de la provocación", señala el comunicado, enviado por el vocero de Duhalde, Luis Verdi.

"El doctor Duhalde ha reclamado desde un principio la apertura del diálogo y la resolución en paz de este problema que afecta a todos los sectores de la producción y del trabajo. Y sostiene que sólo los que actúan con las categorías de la guerra pueden creer que el triunfo deviene por la eliminación del que piensa diferente", culmina el texto.

Las palabras de D Elía, una de las únicas voces del oficialismo que se hicieron públicas, evidenciaron que el clima en torno de la movilización de mañana 18/06/08 es de extrema tensión. En los hechos, en él depositó la Casa Rosada la convocatoria para participar del acto convocado en la Plaza de Mayo por el oficialismo en repudio al paro agropecuario, lo que provocó una fuerte tensión en el PJ.

Las palabras de D Elía se potenciaron con el silencio de otras voces oficiales. Y contrastaron con la propuesta del vicepresidente Julio Cobos para propiciar un debate en torno de las retenciones.

La del diputado Carlos Kunkel fue la otra palabra oficial que se hizo pública ayer. Kunkel respaldó la invitación de D Elía. "Queremos que la ciudadanía pueda expresarse en defensa de la democracia", dijo.

Poco después, sonaron las cacerolas. Y comenzaron los replanteos.

La confirmación acto oficialista en Plaza de Mayo pasó a ocupar un lugar central en el prolongado conflicto entre el Gobierno y el agro. Es que desde varios sectores interpretan que esa convocatoria podría agravar el tenso panorama y alejaría el diálogo, reclamado con fuerza por la ciudadanía a través de los estremecedores cacerolazos de anoche 16/6/08.

Ayer 16/06/08, varios gobernadores justicialistas ya habían adelantado su rechazo a la convocatoria oficial y se espera que hoy hagan explícita su postura ante Néstor Kirchner durante un acto oficial que se realizará en la Casa Rosada esta tarde.

Ocurre que Luis D´ELía fue quien, con un agresivo discurso, anunció la movilización a la Plaza de Mayo. Lo hizo en medio de duras acusaciones de "golpismo" contra el ex presidente Eduardo Duhalde y los dirigentes del sector rural.

El gobernador San Juan, José Luis Gioja, cuestionó con fuerza a D´Elia. "Dice pavadas y no me representa", disparó en declaraciones a radio 10.

A contramano de la mayoría de los referentes del oficialismo, opinó que "habría que derogar" las retenciones móviles, la medida que hizo detonar el conflicto con el campo.

El gobernador de Chubut, Mario Das Neves, confirmó esta tarde que no irá al acto convocado para mañana en Plaza de Mayo en apoyo al Gobierno.

"El peronismo de Chubut no va a asistir mañana a la Plaza porque nosotros planteamos el apoyo con el trabajo de todos los días, con hechos, con acciones, con la democracia de los hechos y no de las palabras", enfatizó Das Neves durante un acto en su provincia.

Tras exhortar al levantamiento de los cortes de ruta, Das Neves cuestionó al dirigente piquetero Luis D´Elía, al afirmar que "de ninguna manera nos puede convocar personajes que le hacen mucho daño no solo a nuestro país, sino también a nuestro querido Partido Justicialista".

El cordobés Juan Schiaretti, desde hace meses enfrentado con la Casa Rosada por su apoyo al reclamo del agro, ya anunció que mañana no estará en la Plaza de Mayo.

"No voy a concurrir porque es un acto convocado con un planteo de enfrentamiento entre los argentinos. Necesitamos que el Gobierno nacional reflexione. Es imperioso trabajar para la paz y la unidad de los argentinos , debe reestablecerse el dialogo", señaló a través de un comunicado.

El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, hizo un enérgico reclamo a Cristina Kirchner para que deje sin efecto la convocatoria y advirtió que mantenerla sería un acto de "autismo" de parte del Gobierno. Además, evaluó que el país atraviesa momentos de "extrema debilidad institucional".

Desde la oposición, también Roberto Lavagna cuestionó la iniciativa de los Kirchner. "El acto de mañana no va a colaborar en nada. Tienen que animarse todos, empezando por el Gobierno, a tener un poco más de altura para enfrentar este conflicto", señaló en declaraciones a radio América.

Sobre los cacerolazos, destacó que "tienen carácter espontáneo" y evaluó que "valen mucho más eso que los actos armados, pagados". En este punto, planteó que "lo peor que podría hacer el Gobierno es ignorarlos o contraponerles actos armados".

Por su parte, el senador y presidente de la UCR, Gerardo Morales, consideró que el oficialismo debería escuchar las sugerencias salidas del propio oficialismo para dejar sin efecto la convocatoria. "Cuando empiezan a aparecer voces desde el propio Gobierno, el matrimonio presidencial se tiene que dar cuenta de que tienen que salir del encierro" destacó en declaraciones a radio Continental.